Mujeres

Más de un millón de mujeres llaman hogar al Estado de Plata. Durante mi carrera en el Congreso, he trabajado  para mejorar los servicios de cuidado de  salud para la mujer, por fortalecer protecciones legales y civiles, y he luchado por su igualdad en las aulas de clase y en los lugares de trabajo. Yo entiendo que todos los asuntos  que abordamos en el Congreso impactan a las mujeres, y voy a continuar luchando por los temas de importancia para las mujeres de Nevada y de todo el país.

 Luchando por un Mejor Cuidado de Salud

Me alegra haber podido liderar la aprobación de legislación que reducirá los costos, proveerá más opciones, y mejora la calidad del cuidado de salud de las familias de Nevada. Con la Ley de Cuidado de Salud, las compañías de seguro médico ya no pueden negar beneficios a los niños que tienen condiciones pre-existentes, o cancelar la cobertura de individuos que se enferman. La nueva ley también significa que los jóvenes menores de 26 años pueden permanecer en el seguro médico de sus padres. Una vez que sea implementada por completo, la reforma de salud prohibirá que las compañías de seguro discriminen en contra de las mujeres, o de otros consumidores debido a su estado de salud. Esta histórica reforma de salud fortalece al Medicare para las personas mayores de edad, cierra el llamado “donut hole”, y asegura que la mujeres siempre tengan opciones de seguros médicos  de calidad asequibles si pierden o cambian de trabajo, se mudan de casa, o si se enferman.

• Ventas Centralizadas de Seguros Médicos: Usualmente, las mujeres toman la decisión sobre que seguro médico es seria el mejor para sus familias. La reforma de salud les proveerá información fácil de entender sobre los diferentes seguros médicos disponibles en Nevada para que puedan comparar precios y cobertura, y se les facilite decidir que opción es la mejor para su familia.
• Primas Reducidas y Créditos Tributarios para Expandir la Cobertura Privada en Nevada: La reforma de seguros médicos reducirá las primas para las familias de $1.400 a $2.000 dólares por los mismos beneficios, comparado con lo que costarían en el 2016 sin una reforma de salud. La reforma también otorgará $5 mil millones de dólares en créditos fiscales para los residentes de Nevada del 2014 al 2019 para que puedan comprar seguros médicos.
• Cuidado de Prevención para Mejorar Nuestra Salud: La Ley de Cuidado de Salud asequible reducirá las enfermedades prevenibles más comunes en las mujeres al eliminar los costos de bolsillo y los deducibles por cuidados  preventivos recomendados, y exámenes como los mamografías. También añade visitas de bienestar anuales al programa de Medicare, dando a las mujeres la oportunidad de desarrollar planes personalizados de prevención y de  evaluar los riesgos de enfermedades.
• Incremento de Ayuda del Medicad: El gobierno federal  financiará la expansión de la cobertura del Medicare por los primeros tres años, y continuará ofreciendo apoyo sustancial, pagando por el 90 por ciento de los costos después del 2020, comparado al 50,2 por ciento que aporta actualmente. Nevada podría recibir hasta $3.600 millones de dólares en fondos del gobierno federal para Medicaid como resultado de esta expansión.

Para aprender más sobre los beneficios de La Ley de Cuidado de Salud Asequible, por favor presione aquí.

Los Estados Unidos tiene una de las tasas más altas de embarazos no deseados de todas las naciones industrializadas. El 50 por ciento de los embarazos en los Estados Unidos son embarazos no deseados,  la mitad de los cuales terminan en abortos. Es por esto que he liderado los esfuerzos para mejorar el acceso a los anticonceptivos y reducir los embarazos no deseados en nuestro país. Luché para que la Ley de Cuidado de Salud Asequible incluyera una medida que garantiza que las mujeres con cobertura médica tengan acceso a anticonceptivos aprobados por la FDA sin costos de bolsillo a partir de agosto del 2012.

También apoyé legislación, la cual ya es ley, que permite que cientos de proveedores de salud comunitarios tengan acceso a anticonceptivos a bajo costo. Sin esta ley, los altos precios de las medicinas harían muy difícil que las mujeres tuvieran acceso a estos centros de salud comunitarios y a los servicios de planificación familiar para prevenir embarazos no deseados. Esta legislación con sentido común no le costó ni un centavo a los contribuyentes.

También trabajé para que fuera más fácil para los estados extender la cobertura de Medicaid para los servicios de planificación familiar, y de cuidado materno y posparto si resultan embarazadas. También patrociné una ley bipartidista que requiere la cobertura por anticonceptivos para empleados federales.

El financiamiento para la investigación de enfermedades específicas a la mujer es una de mis prioridades. Cuando llegué al Senado, me decepcionó enterarme que el financiamiento para estas enfermedades había sido recortado. Aunque algunos de estos recortes afectan a hombre y mujeres, afectan a las mujeres  en mayor proporción que a los hombres. Por ejemplo, las mujeres corren más riesgo de tener un segundo paro cardiaco que los hombres.  Continuaré apoyando el financiamiento de investigaciones que demuestren por qué ciertas enfermedades afectan a las mujeres desproporcionadamente.

El cáncer de seno es una de esas enfermedades que están teniendo un efecto devastador entre las mujeres de Nevada, con más de 1,770 mujeres diagnosticadas con cáncer este año en nuestro estado. Estoy orgulloso de haber patrocinado la Ley de Investigación del Cáncer de Seno y el Medio Ambiente. Esta legislación incrementó la investigación y estableció una estrategia nacional para estudiar el rol del medio ambiente en el desarrollo del cáncer de seno. Los posibles descubrimientos podrían ser claves para mejorar nuestro entendimiento de esta enfermedad compleja, lo que podría resultar en el descubrimiento de nuevos tratamientos y tal vez, algún día, poder encontrar una cura.

Al mismo tiempo, continuaré apoyando programas financiados por el gobierno federal, como el Centro de Salud para las Mujeres de Nevada,  para asegurar el acceso a exámenes y tratamientos que salvan vidas. El Programa Nacional para la Detección Temprana del Cáncer de Seno y de Cérvix ha tenido un gran éxito en todo el país. El programa proveyó 10,1 millones de exámenes de cáncer en los 50 estados del país, con más de 51.100 casos de cáncer de seno y 2.900 de cáncer de cérvix detectados. Desafortunadamente, ya que estas mujeres no tienen seguro medio, a veces no reciben el tratamiento que necesitan. Para ayudar a resolver este problema, copatrociné la Ley para el Tratamiento del Cáncer de Seno y de Cérvix para permitir que las mujeres diagnosticadas bajo este programa reciban el tratamiento que necesitan. Como resultado, las mujeres de Nevada diagnosticadas por el Centro de Salud para las Mujeres de Nevada serán elegibles para recibir Medicaid hasta que completen su tratamiento y visitas al médico.

Las mujeres se merecen igualdad de pago. Desafortunadamente, la mujer promedio recibe un salario de 77 a 81 centavos por cada dólar que recibe un hombre que hace el mismo trabajo. Aun considerando la diferencia en su educación y el tiempo que llevan en la fuerza laboral, la mujer no recibe la misma paga que los hombres por hacer el mismo trabajo. Es por eso que estoy orgulloso de haber sacado adelante la aprobación de la Ley de Salario Justo de Lilly Ledbetter en el Senado. Esta ley de corte histórico restauró la paga retroactiva e impone protecciones civiles para los trabajadores que enfrentaron discriminación basada en sexo, edad, raza, nacionalidad, religión, o discapacidad. Esta legislación ayudará a asegurar que los hombres y las mujeres reciban una paga justa y que tengan la oportunidad de protegerse bajo la ley.

También fui el copatrocinador original de la Ley de Pago Justo, la cual revisó y fortaleció la Ley de Pago Equitativo de 1963 para combatir las discrepancias de salarios en la fuerza laboral. Intenté poner la Ley de Pago Justo a votación en el pleno del Senado, pero me decepcionó cuando mis colegas de la otra bancada usaron el filibusterismo para prevenir que el Senado considerara esta iniciativa tan importante.  Y aunque la mayoría de los Senadores votaron a favor de esta medida, no contó con los 60 votos necesarios para superar la obstrucción. A pesar de esta situación, continuaré luchando por la igualdad de la mujer. Continuaré protegiendo a las mujeres de clase media para que puedan mantener a sus familias durante estos momentos económicos tan difíciles, y con las mujeres jóvenes quienes están en la universidad con la esperanza de obtener un buen trabajo cuando se gradúen.  No se le debería pagar menos a una mujer que hace el mismo trabajo que un hombre.

En el 110^mo Congreso, ayudé a aumentar el salario mínimo federal  por la primera vez en 10 años, otorgando un aumento de pago a millones de mujeres en el 2007. Esta ley aumentó el salario mínimo de $5.15 dólares por hora a $7.25 por hora en dos años, lo que benefició directamente o indirectamente a 13 millones de estadounidenses.  Los Nevadenses saben muy bien que los costos de vivienda, de la comida, y la gasolina ha aumentado desde que el salario mínimo fue aumentado la última vez. Este tema es particularmente importante para las mujeres, ya que forman 2/3 de la fuerza laboral a la que se le paga menos que el salario mínimo federal.

Debemos apoyar los derechos de las mujeres en casa y en el extranjero.  Siempre he apoyado los esfuerzos para cancelar una medida errónea que niega fondos a los grupos que promueven la salud de la mujer y reducen los embarazos no deseados, al educar a las mujeres sobre métodos de planificación familiar. Me alegró cuando el presidente Obama derogó esa ley en el 2009. Esta decisión está ayudando con el avance de varias metas importantes: la reducción de tasas de mortalidad materna e infantil, la reducción de embarazos no deseados y abortos, y la lucha contra el VIH/SIDA e infecciones de transmisión sexual en países en vía de desarrollo.

Otro asunto que me preocupa es el de la mutilación genital a las mujeres (FGM por sus siglas en inglés), un procedimiento cruel que ha sido reconocido internacionalmente como una violación de los derechos humanos de las mujeres y niñas. En 1996, patrociné legislación que  hizo la práctica de FGM ilegal en los Estados Unidos.  Soy el patrocinador de la legislación conocida como la Ley para la Protección de Niñas del 2011, la cual fortalece la ley de 1996 al prohibir el transporte de niñas al extranjero para ser mutiladas.

También he apoyado la financiación del Fondo de Población de las Naciones Unidas, una organización internacional que provee servicios de salud reproductiva que salvan vidas, trabaja para prevenir la mutilación genital entre las mujeres, lucha contra la propagación del VIH/SIDA, y ayuda con los partos de madres embarazadas.

Durante mi carrera en el Congreso, he apoyado legislación federal y programas diseñados para prevenir la violencia doméstica y ayudar a sus víctimas, incluyendo la Ley de Asistencia y Prevención de Violencia Familiar, subvenciones para combatir la violencia contra la mujer, y la Ley de Victimas del Crimen.  También fui el copatrocinador original de la Ley Sobre Violencia Contra la Mujer (VAWA por sus siglas en inglés), la ley histórica que expande significantemente  el compromiso del gobierno federal con eliminar la violencia contra las mujeres. Entre muchas de sus medidas, VAWA provee fondos federales para policías, magistrados, y asesores para el enjuiciamiento de este tipo de delitos, la evaluación de las necesidades de las víctimas, la educación al público, y la prevención de la violencia sexual. Trabajé arduamente para reautorizar VAWA, y me enorgulleció de que el proyecto bipartidista del Senado, el cual yo copatrociné, fue aprobado por la Cámara de Representantes y firmado por el Presidente.

Apoyo el Título IX, el cual prohíbe la discriminación basada en sexo para tomar parte en programas o actividades educativas financiadas en parte por el gobierno federal.  Las personas piensan que el Título IX solo se aplica a actividades atléticas, sin embargo, esta ley se aplica en cualquier ámbito educacional. El Título IX ha sido clave para promover la igualdad en los deportes en las preparatorias y universidades del país. El lograr la igualdad en los deportes universitarios todavía es un desafío.  Debemos tener más igualdad en los deportes y continuar abriendo las puertas de estos deportes a las mujeres.