Washington, DC—El Líder Demócrata del Senado Harry Reid condenó hoy el veto del Presidente Bush a una legislación histórica sobre células madre que hubiera abierto la promesa de nuevos remedios y tratamientos para los millones de estadounidenses que sufren de enfermedades debilitantes. El veto de hoy es la culminación de un proceso de cinco años, que comenzó con la orden ejecutiva del presidente en agosto de 2001 que restringe estas investigaciones tan importantes y que ha echado hacia atrás el progreso científico y e investigativo en EEUU. Esto le ha negado la esperanza a millones.

Los demócratas han luchado por años para levantar las restricciones del Presidente Bush a la investigación de las células madre embrionarias y darle esperanza a millones de estadounidenses que buscan nuevos remedios que esto pudiera brindar.  A pesar de las frecuentes promesas y garantías, los republicanos en el Senado esperaron catorce meses después de que la Cámara de Represéntates aprobó el proyecto de ley HR 810,  el Proyecto de Ley de Investigación de Células Madre (H.R. 810), para presentarlo en el pleno del Senado.  Su aprobación fue un momento de orgullo y una victoria grande para el pueblo estadounidense.  Desafortunadamente, gracias al Presidente Bush, esa victoria tendrá una vida corta.

“El presidente que no vetó presupuestos que le recortan a los más necesitados para pagar por los recortes de impuestos a los ricos, el presidente que no vetó los miles de millones de dólares de regalos a compañías como Enron y Exxon, sí vetó las esperanzas y sueños de las generaciones futuras de encontrar nuevos adelantos médicos para hombres y mujeres como Nancy Reagan y Michael J Fox”, dijo Reid. “Los demócratas no nos rendiremos en la lucha por la investigación de células madre. Es una lucha que los Estados Unidos deben ganar. Vamos a presionar a los republicanos para invalidar el veto del presidente — tal y como presionamos para presentarlo en el pleno del Senado y tal y como presionamos para que este proyecto de ley se aprobara”.

Para los estadounidenses con enfermedades debilitantes y con discapacidades la investigación de células madre embrionarias ofrecen una esperanza enorme para nuevos remedios y tratamientos.  Desafortunadamente, ha sido una esperanza que se ha tardado años gracias a las decisiones y retrasos de los republicanos en Washington.  En cambio, un Congreso republicano sello de goma que se ha destacado más por la inacción, puso su apoyo a la ideología derechista por encima de la salud de las familias estadounidenses.  Ahora, a pesar del apoyo abrumador del pueblo estadounidense, el Presidente Bush usará el primer veto de su Administración para bloquear una de las pocas acciones del Congreso que ayudará al país.

“Este debiera haber sido un día de esperanza para millones de estadounidenses”, dijo Reid. “Los demócratas escuchamos al pueblo estadounidense y por nuestra persistencia alcanzamos vencer las demoras de los republicanas de aprobar una legislación crítica sobre células madre. Desgraciadamente, en menos de 24 horas, el Presidente Bush desafió la voluntad del pueblo estadounidense y aplastó las esperanzas de millones de personas que sufren de enfermedades graves y debilitantes como el cáncer, la diabetes, Alzheimer’s, Lou Gehrig’s y Parkinson’s. La necesidad de una nueva dirección para los Estados Unidos nunca ha sido más clara”.

Los demócratas están comprometidos con abrir la promesa de una investigación de células madre y determinados con no permitir la obstrucción del  Presidente Bush de atrasar una legislación que pueda salvar vidas. El proyecto de ley HR 810 fue aprobado en el Congreso con amplio apoyo bipartidista y los demócratas les han hecho un llamado a los republicanos, que alegan apoyar este proyecto de ley esencial, a que ayuden a invalidar el veto del Presidente Bush.  Ayer, después del voto del Senado, cuarenta y un demócratas enviaron una carta al Líder de la Mayoría del Senado, el Doctor Bill Frist, urgiéndolo a que inmediatamente emprenda el trabajo con sus colegas republicanos para organizar este esfuerzo importante. Los millones de estadounidenses que están mirando al Congreso con esperanza juzgarán a sus líderes por sus acciones y no sus palabras.

Durante cinco años, los estadounidenses han estado observando el retraso de los republicanos de esta legislación tan importante sobre células madre. Ahora, gracias a la persistencia de los demócratas, el Congreso lo ha aprobado. Para los republicanos que reclaman apoyar la investigación de células madre, el tiempo ha llegado para demostrarlo. Los estadounidenses quieren una nueva dirección, donde la ciencia contundente venga antes que ideología y de que el futuro de los Estados Unidos venga antes que el futuro político de los republicanos.

 

###