“Aunque cualquier noticia sobre la creación de empleos en la economía de Bush es una buena noticia, los Estados Unidos podrían estar mejor. Este no es el momento para auto-felicitarse. Es momento de ponernos a trabajar en los problemas que las familias de los Estados Unidos enfrentan todos los días, tales como los crecientes precios de los combustibles, costos de cuidados médicos estratosféricos, y alivios de impuestos para la clase media.

“El historial económico de Bush-Cheney muestra muy pocos beneficios para muchas familias estadounidenses. Los Republicanos necesitan hacer a un lado las prioridades erróneas que benefician sólo a unos cuantos y unirse a los Demócratas en nuestro esfuerzo por generar resultados reales para las familias de los Estados Unidos, al trabajar para bajar los precios de los combustibles, hacer que los Estados Unidos sea independiente en materia energética, salvaguardar las pensiones, hacer que la educación universitaria esté al alcance de más gente y que los cuidados médicos de calidad estén disponibles para más personas en los Estados Unidos.”

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